Con un moño negro en el portón del Rancho los 3 Potrillos, recibió a los asistentes que decidieron recordar a Vicente Fernández en su aniversario luctuoso.
Se oficiaron dos misas en honor al Charro de Huentitán, en la primera, su familia y amigos cercanos rezaron por él. Y en la segunda, su público y fanáticos asistieron para despedirlo.
“Y volver volver. Y mi padre era el rey”, fueron los cánticos de los hijos del “Charro de Huentitán”.
“Sus abrazos ya no van, trato e intento pero sí está muy difícil”, dijo entre lágrimas Camila Fernández.
“Para mí es una fiesta, yo lo tengo aquí, él está aquí, no se fue, no lo quise sepultar en ningún panteón, él no quería salir de su rancho y aquí se queda”, dijo Doña Cuquita.
Al finalizar la misa, los hijos y la viuda de Vicente Fernández se posicionaron frente a su tumba, y ahí, rociaron agua bendita mientras rezaban.
La dinastía Fernández portó unas camisas blancas con la imagen del Charro de Huentitán, mientras que Doña Cuquita Abarca decidió entregar dos recuerditos. El primero, un llavero con la imagen de su amado, y el segundo, un cuadro de la Virgen de Guadalupe.
Para cerrar, se lanzaron unos globos blancos al cielo.
CON INFORMACIÓN DE KEVIN CASILLAS.MX